El exsecretario de Salud Adolfo Rubinstein destacó hoy la oficialización del protocolo para el acceso al aborto no punible y la definió como «una gran medida» que le da «entidad jurídica» a un documento sanitario que va a evitar el «caos» en el cumplimiento de le establecido por el Código Penal desde 1921.

«Es una decisión muy buena. Celebro y estoy muy contento de que su vuelva a restablecer el protocolo. Se trata del cumplimiento de la ley», sostuvo el exfuncionario nacional.

En diálogo con Radio La Red, el dirigente de origen radical, que presentó la renuncia en el final de la gestión de Mauricio Macri luego de que el mandatario derogara la publicación de este protocolo, subrayó que con la medida de González García «es la primera vez que tiene norma este documento».

«Hasta ahora estaba en la página web del Ministerio de Salud, pero no tenía entidad jurídica suficiente para evitar muchas veces ese caos que existía en las provincias, porque algunas adherían y otras no, tenían su propio protocolo, algunas apoyaban a los médicos, otras los escrachaban», remarcó.

Y añadió: «Es una resolución ministerial que le da certidumbre a los médicos y a los equipos de salud de cómo tienen que realizar los procedimientos cuando existen las causales de interrupción legal del embarazo».

El exsecretario de Salud celebró que el protocolo de acceso a la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) apunta a «defender y garantizar el derecho a interrumpir el embarazo cuando existan causales previstas en la ley».

Respecto a lo que fue su salida del Gobierno de Cambiemos, en noviembre pasado, Rubinstein manifestó: «Tengo la sensación de frustración, porque no fue el final que yo hubiera querido.

Tampoco anticipé la profunda repercusión política y social que iba a tener este tema, sobre todo la política en el Gobierno, porque era ordenar el cumplimiento de la ley para garantizar un derecho que ya está garantizado».

Por otra parte, halagó al actual ministro de la cartera sanitaria y señaló que «siempre» coincidieron «en las políticas progresistas de salud».

«Se lo dije a Ginés: si el me convoca para apoyarlo, ayudarlo y asesorarlo, por supuesto que lo voy a hacer, como sé que él lo haría si yo estuviera en su posición. Él es peronista y yo, radical, pero coincidimos en la mayoría de las políticas sanitarias, que tienen que ser políticas de Estado», finalizó.