El temporal de lluvia y viento
que azota al Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) provocó
esta noche la muerte de una mujer, voladuras de techos, calles
inundadas, árboles caídos y cortes en el servicio de suministro
eléctrico.
Fuentes policiales informaron a Noticias Argentinas que la
víctima, de unos 74 años, bajaba de un Ford Focus en la calle
Arenales al 2800 del barrio porteño de Recoleta cuando le cayó una
baranda del noveno piso, la cual se desprendió debido a los
fuertes vientos.
El objeto cayó sobre la víctima y le ocasionó casi de inmediato
la muerte.
Personal policial conjuntamente con el SAME arribaron al lugar
y constataron el deceso, al tiempo que los uniformados de Policía
Científica realizaban las pericias correspondiente sen el balcón
en cuestión.
Asimismo, se reportó la voladura del techo de un gimnasio y
destrucción de paredes del lugar en la localidad bonaerense de
Claypole, al tiempo que se reportan calles inundadas y cortes en
el suministro eléctrico por el temporal que se desarrollaba en el
AMBA.
El hecho ocurrió alrededor de las 18:00 en el local de «Sport
Dance», ubicado entre la calle Cabral y la avenida Montevideo, del
partido bonaerense de Almirante Brown.
En ese momento, la lluvia se desató con intensidad y más allá
que trascendió que algunas personas habrían resultado heridas,
tanto el parte policial como los dueños del espacio confirmaron
que no hubo víctimas.
La ciudad de La Plata fue una de las más afectadas por el
diluvio y la caída de granizo.
Allí se produjeron inundaciones, hubo autos arrastrados por la
corriente y árboles caídos, además de cortes en el suministro
eléctrico.
Por otro lado, usuarios de las redes sociales de Quilmes
subieron fotos y videos sobre los anegamientos.
Por otro lado, el servicio del tren sufrió alteraciones en su
funcionamiento en distintos ramales y estaciones producto de las
complicaciones climáticas.
En ese sentido, la Línea Roca ramal Ezeiza operaba con servicio
limitado entre Plaza Constitución-Temperley por anegamiento de
vías en Turdera, mientras que los servicios La Plata y Bosques vía
Quilmes estaban interrumpidos por falla de catenarias.
Asimismo, el ramal diésel Ezeiza-Cañuelas quedó interrumpido
por anegamiento de vías, al tiempo que el servicio de Alejandro
Korn y Bosques vía Temperley se desplazaba con demoras y
cancelaciones.
La zona sur del Conurbano, sobre todo nuevamente los distritos
de Lanús y Avellaneda también sufrían inundaciones en varios
sectores, con caída de carteles y árboles.
En la Ciudad de Buenos Aires se reportaban caídas de árboles,
pero también zonas inundadas, sobre todo en el límite entre
Liniers y Mataderos.
También se emitió un alerta roja en el Aeropuerto de Ezeiza,
donde se cancelaron las actividades en la pista y había vuelos
demorados o suspendidos desde las 17:30.
En tanto, en la ciudad bonaerense de 9 de Julio se generó una
fuerte tormenta, con lluvia, vientos que superaron los 100
kilómetros y granizo, lo que provocó heridas leves a algunos
vecinos, caídas de árboles, voladuras de techos y el corte del
suministro eléctrico en algunos barrios.
Debido al temporal, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN)
recomendó permanecer en construcciones cerradas como casas,
escuelas o edificios, mantenerse alejado de artefactos eléctricos
y evitar el uso de teléfonos con cable.
En caso de estar viajando, se recomendó quedarse en el interior
del vehículo, evitar circular por calles inundadas o afectadas y
si hay riesgo de que el agua ingrese en una vivienda, cortar el
suministro eléctrico.
En las localidades donde hubo granizo más grande de lo normal y
fuerte ráfagas de viento se produjo la denominada «tormenta
supercelular»o «supercelda», que consiste en la conformación de
nubes que son capaces de provocar este fenómeno climático.
Están asociadas al desplome de aire frío, a las corrientes de
aire ascendentes y descendentes, y a mucha cantidad de lluvia en
poco tiempo.
A diferencia de una nube de tormenta común, que tiene un ciclo
de vida de entre 20 y 40 minutos, esta puede tener un ciclo de
vida de muchas horas y ocasionar destrozos en una gran cantidad de
kilómetros.