La presidenta del 57 Coloquio de IDEA, Paula Altavilla, advirtió hoy que la Argentina atraviesa una «profunda crisis de confianza» que es «muy limitante» tanto para las personas como para las empresas.

«Con nuestro potencial, ¿Por qué nos cuesta tanto cambiar la tendencia y crecer en forma genuina y continua?», se preguntó la empresaria en la apertura del Coloquio, que se desarrolla en el Centro Costa Salguero, de Capital Federal.

En ese marco, Altavilla consideró que «parecería que esta crisis compleja, con componentes económicos, políticos, sanitarios, culturales, está anclada en una profunda crisis de confianza».

«Y la falta de confianza es muy limitante. A las personas nos limita a la hora de asumir riesgos para cumplir nuestros sueños como el de la casa, o el emprendimiento propio. Y a las organizaciones las limita a actuar pensando sólo en el corto plazo», añadió.

Altavilla sostuvo que muchos empresarios «tuvieron que archivar con tristeza y frustración proyectos de inversión solamente porque ‘la volatilidad en Argentina los hacía demasiado riesgosos’».

«Y es esa sensación de peligro inminente que genera nuestro desorden macroeconómico la que se refleja en la tasa de inversión, que está por debajo del nivel mínimo necesario para mantener el capital instalado, y en los puestos de trabajo formal privado, que no crecen desde hace una década», añadió.

A su criterio: «Hace falta recuperar la confianza para que podamos tomar colectivamente las decisiones de inversión y de generación de empleo productivo que realmente muevan la aguja del crecimiento, que requieren un horizonte más largo, porque son las decisiones que construyen futuro».

Para la empresaria: «Tenemos que encontrarnos, escucharnos y ponernos de acuerdo en algunos consensos mínimos para poder empujar todos juntos. El desafío es que no estamos acostumbrados a colaborar. Estamos acostumbrados una dinámica de confrontación y de puja de intereses».

«La clave está en empezar por un acuerdo mínimo, a partir de un objetivo en común. Hay que generar trabajo genuino y productivo para recuperar el horizonte progreso que nos reclaman y están yendo a buscar muchos de nuestros hijos», enfatizó.

También, destacó que es necesario «generar las condiciones necesarias para que los emprendedores elijan seguir innovando, creando sus empresas y manteniendo sus casas matrices acá».

En ese sentido, agregó: «Para eso, sindicatos, movimientos sociales, empresarios, Estado, nos tenemos que poner de acuerdo que queremos que estas empresas se instalen y crezcan en la Argentina».

Para Altavilla: «Los líderes empresariales, sindicales, sociales y políticos argentinos tenemos que tomar una decisión: seguir haciendo lo mismo que venimos haciendo hasta ahora y ser recordados como la generación responsable de que la Argentina estructuralice este nivel de pobreza y se convierta en un país pobre, de pobreza hereditaria».

«O podemos elegir ser la generación que cambie la tendencia y genere un punto de inflexión, para que la Argentina vuelva a ser un país de oportunidades», concluyó.