El senador nacional del Frente de Todos Oscar Parrilli señaló que baraja la posibilidad de enjuiciar a los querellantes y funcionarios judiciales que impulsaron la causa por el Memorándum de Entendimiento con Irán, ya que remarcó que «no puede quedar esto así tan impune».

«Lo voy a conversar con mis abogados. No puede quedar esto así tan impune, que puedan mancillar el buen nombre y honor de tanta gente y causarle tantos problemas con total impunidad», sostuvo el ex secretario general de la Presidencia al referirse a la chance de que avance en una denuncia por presuntos daños y perjuicios a su figura.

En declaraciones radiales, el referente kirchnerista destacó la decisión del Tribunal Oral Federal N° 8 de sobreseer a los acusados de un impulsar un supuesto encubrimiento del atentado terrorista contra la sede de la AMIA mediante la firma del Memorándum de Entendimiento con Irán y afirmó que el fallo «es un desagravio a la memoria de (el ex canciller) Héctor Timerman, su trayectoria, su hombría de bien y su condición de judío».

«Es un acto de estricta justicia. Es muy positivo que se dé dentro del mismo Poder Judicial este fallo, que desnuda con toda claridad, pruebas y hechos concretos la gran mentira que se montó alrededor de la firma del Memorándum con Irán», planteó el ex director general de la AFI.

El neuquino aseguró que a la denuncia realizada por el fiscal Alberto Nisman «se la utilizó como un engranaje más de una estrategia internacional», en la que habrían intervenido incluso los fondos buitre.

«Cuando uno lee los fundamentos se da cuenta de toda la gran mentira que se montó, la relación entre (Gustavo) Hornos, (Mariano) Borinsky, (la Quinta de) Olivos, la DAIA, las reuniones entre ellos, el interés de (el ex presidente Mauricio) Macri por llevar adelante esta causa, (Claudio) Bonadio, (Eduardo) Taiano, (Juan Bautista) Mahiques», subrayó Parrilli.

El senador nacional fue uno de los beneficiados con el fallo unánime de los jueces del TOF 8, María Gabriela López Iñíguez, Daniel Obligado y José Michilini, quienes sobreseyeron también a la vicepresidenta, Cristina Kirchner; al procurador del Tesoro, Carlos Zannini; y a Timerman.

En esa lista entraron también los dirigentes sociales Fernando Esteche y Luis D´Elía, quienes luego de su sobreseimiento responsabilizaron al ex presidente Mauricio Macri por el tiempo que pasaron detenidos.

«Tengo sensaciones encontradas porque si bien es un sosiego, no hay manera de reparar y resolver los dos años preso con todo lo que eso implica y el proceso penal impacta en la vida», reflexionó Esteche.

D´Elía, por su parte, responsabilizó «políticamente a Macri» y sostuvo: «La campaña presidencial de Macri empezó el día después de la muerte de Nisman, encabezando él una marcha con todos los fiscales. Fue el primer acto de campaña electoral de Macri. Una cosa brutal».

Ambos sobreseídos dialogaron con La990 a menos de 24 horas del fallo del Tribunal Oral Federal número ocho que determinó que no hubo delito en la conducta de todos los imputados, entre ellos la vicepresidenta, Cristina Kirchner.

Esteche fue crítico, pese al sobreseimiento, con el tribunal: «Estos tres mismos jueces que ahora dicen que no hubo delito son los que me negaron la excarcelación y la revocación de la preventiva durante un año y medio». «Estando en cana yo me perdí el primer día del primer grado de mi cuarto hijo. Desde esos lugares más cotidianos y más chiquitos es donde elijo alojarme y estar un poco más cómodo en esta situación», describió.

D´Elía, por su parte, recordó: «Hace seis años una madrugada me vinieron a buscar, me esposaron, me pusieron un casco y un chaleco antibalas, 50 movileros en la puerta de mi casa. Un show increíble». En ese contexto, celebró el fallo de la víspera: «Con esto empieza a derrumbarse la aplicación del lawfare en la Argentina. En esta causa nunca se entendió de qué nos acusaban.  Fue todo absolutamente inverosímil».

Esteche terció que «era duro andar por las calles con una acusación de traición a la patria o de encubrir un atentado terrorista. Las acusaciones eran violentas y de peso pesado desde el punto de vista moral».