El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, consideró anoche que las restricciones sanitarias impuestas por el Gobierno nacional para frenar la segunda ola de contagios de coronavirus dieron resultado y «los casos están bajando».

«Estoy conforme, se hizo un sacrificio muy grande y hay resultados. Un sector de la oposición no quería restricciones y hubiera sido un desquicio. Si no las hubiéramos aplicado todo hubiera detonado», explicó Kicillof en una entrevista concedida a C5N.

No obstante, sostuvo que en los últimos días se había llegado a «un nivel de muertos inmenso e intolerable».

Sostuvo que en primer lugar, en la provincia de Buenos Aires se había estancado en un nivel de 12 mil casos diarios de coronavirus y en los últimos días descendió a unos nueve mil, lo que redunda en una reducción de casos del 18 por ciento.

Kicillof dijo que visita terapias intensivas y ve como los médicos «lloran porque se les muere la gente».

«La única forma de bajar las muertes es bajar los contagios. Es muy fácil criticar por Twitter», dijo.

En cuanto a las clases, aseguró que en su administración no se ignora el costo.

«Estamos ansiosos por volver a la presencialidad, se interrumpió la presencialidad no las clases, hay un esfuerzo inmenso de los docentes, pero no ignoramos el costo», expresó.