Los ingresos tributarios del Tesoro porteño sufrirán una fuerte baja cuando el Banco Central traspase su deuda al Tesoro Nacional.

Es que una parte de la recaudación de la Ciudad de Buenos Aires surge de gravar con Ingresos Brutos los pases del Banco Central.

Esos ingresos tributarios representan aproximadamente el 20% de lo que el gobierno porteño recauda por ese gravamen.

Las nuevas Letras de Regulación Monetaria no podrán se gravadas con ingresos brutos.

Hasta ahora, la Ciudad le aplica una alícuota equivalente al 8% a esas operaciones de intermediación financiera.

Como la mayoría de los bancos tienen su sede en la Ciudad de Buenos Aires, este impuesto representa un fuerte ingreso para las arcas porteñas.

Esto explicaría por qué el jefe de Gobierno de la Ciudad, Jorge Macri, volvió a reclamar con fuerte que el Tesoro cumpla con el fallo de la Corte Suprema que establece que el Estado Nacional debe devolverle a la Ciudad la Coparticipación Federal que le quitó el gobierno de Alberto Fernández.

Fernández había achicado por decreto el porcentaje de Coparticipación Federal por aproximadamente un punto para dárselo a la provincia de Buenos Aires, con el fin de que financie a la policía bonaerense.

Para compensar esos ingresos, el anterior gobierno de Horacio Rodríguez Larreta gravó con ingresos brutos las operaciones de pases del Banco Central.

La alícuota del 8% de Ingresos Brutos permitió subir la recaudación de ese gravamen en un 20%.

En 2023 el gobierno porteño recaudó casi $800.000 millones gracias a este tributo.

foto y texto: NA