La producción de acero crudo trepó a 370.900 toneladas durante enero último, y fue 7,9% mayor a la de igual mes del año pasado, informó  la Cámara Argentina del Acero.

La entidad detalló que la producción del primer mes de 2019 fue 4,2% superior a la de diciembre de 2018.

Además, puntualizó que la producción total de laminados terminados en caliente fue de 302.400 toneladas, 20,3% menor en la comparación interanual, mientras que la de laminados en frío decreció 38,9% en el mismo período.

Con respecto a la evolución de los sectores que utilizan acero como materia prima, el informe señaló que durante enero, en la industria de la construcción «continuó la tendencia descendente».

La menor actividad de la obra pública, sumada a la baja de solicitudes de créditos hipotecarios, tuvo un fuerte impacto en el desempeño del sector. No se perciben aún señales de recuperación luego de la caída del cuarto trimestre de 2018″, añadió.

Por su parte, la industria automotriz «comenzó el año con una pronunciada caída de su actividad, especialmente en automóviles con paradas por vacaciones en varias plantas».

En tanto, el segmento de maquinaria e implementos agrícolas «continúa con niveles muy bajos de producción. Se prevé que la nueva cosecha, que puede ser récord, sumado a la recuperación del crédito, inviertan la tendencia a partir de abril y mayo», indicó el reporte.

También, sostuvo que el sector de energía ha mantenido su demanda interna, motorizada por las inversiones en los yacimientos no convencionales de Vaca Muerta, con una merma en los volúmenes exportados.

Por último, el sector de electrodomésticos -según la Cámara del Acero- «fue uno de los que más sufrió durante 2018. No se vislumbra un rápido cambio de tendencia en los niveles de producción, a pesar de las promociones de fin de año. Asimismo, la cadena de comercialización acumula altos volúmenes de stock».

Además, alertó que esta actividad «tiene dificultad para exportar a la región, por la presencia de productos chinos que inundan los mercados regionales».