La CGT puso «a disposición del Poder Ejecutivo Nacional toda la infraestructura edilicia de las organizaciones sindicales», y sus «instituciones de salud para coordinarse con el Ministerio de Salud», a fin de contener la pandemia del coronavirus.

De esta forma, el Poder Ejecutivo podría utilizar sedes sindicales para el aislamiento de determinadas personas (por ejemplo aquellas que están en situación de calle) y disponer que las clínicas pertenecientes a las obras sociales sindicales atiendan a pacientes infectados con coronavirus.

También la iniciativa prevería que las plazas de los hoteles que son propiedad de los gremios puedan alojar a potenciales enfermos de coronavirus pero con baja intensidad en la afectación de su salud.

«Valoramos positivamente el plan de acción y los protocolos desarrollados por el Ministerio de Salud para contener con prontitud el brote de la infección. Hoy más que nunca reafirmamos el valor social determinante de un Estado presente y activo en el combate contra esta grave epidemia», sostuvo la central en un comunicado.

La entidad que conducen Héctor Daer y Carlos Acuña, además, expresó su apoyo a «las medidas excepcionales de aislamiento social obligatorio dispuestas por el Presidente de la Nación».