El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, reiteró hoy la advertencia sobre que «si los números no bajan» habrá que «ir a una cuarentena mucho más dura», al tiempo que llamó a no «politizar la pandemia» y destacó el trabajo conjunto con el mandatario porteño, Horacio Rodríguez Larreta.

«Sepan que si los números no bajan, va a haber que ir a una cuarentena mucho más dura, porque si no las camas se llenan y no podemos permitir que alguien se quede sin su derecho», resaltó Kicillof.

Al participar junto al jefe de Gobierno porteño del anuncio de una nueva etapa de cuarentena que encabezó el presidente Alberto Fernández, el gobernador destacó que ante la pandemia el oficialismo y la oposición trabajan «juntos», por lo que reclamó a otros sectores que «no traten de politizar la pandemia».

«Teníamos un sistema muy débil y lo fortalecimos. Fue porque el oficialismo y la oposición pudimos trabajar unidos», subrayó en la Quinta de Olivos.

El mandatario provincial agradeció al Presidente por haber propiciado la «coordinación» con el jefe de Gobierno y los gobernadores «a pesar de las diferencias en lo ideológico o lo partidario».

«No traten de politizar la pandemia, porque estamos mostrando que es el camino equivocado», resaltó Kicillof.

Además, sobre la relación con la Ciudad, recalcó: «El AMBA es una sola región sanitaria, por eso no hay forma que nos dividan, de que nos hagan pelear».

«El virus cruza la General Paz cuando quiere», señaló el gobernador bonaerense, y dijo que con Rodríguez Larreta han «podido avanzar en políticas, a pesar de las diferencias ideológicas, para dedicarse pura y exclusivamente a ciudad la salud» de los ciudadanos.

En tanto, reafirmó el «concepto de cuarentena intermitente», y precisó que en la Provincia seguirán «con el mismo grado de apertura limitada».

«Reafirmamos ante una situación como esta el concepto de cuarentena intermitente, pero no es solamente evitar que se nos desborde el sistema de salud, es evitar que se nos contagie más gente», enfatizó.

El gobernador afirmó que le «preocupa el sector privado de salud» porque «tienen un 74% de ocupación», al tiempo que alertó sobre que «el 20 por ciento de los fallecidos son menores de 60 años».

«Nadie está exento de que la enfermedad toma una forma grave», agregó Kicillof.