La ciudad de Buenos Aires no descarta la posibilidad de volver para atrás con las últimas flexibilizaciones de la cuarentena obligatoria, pero esperará a la próxima semana para tomar la decisión, en medio del crecimiento de casos de coronavirus en el distrito, que posee el número de contagios más alto del país.

«En ocho o diez días vamos a hacer una evaluación» sobre la marcha de la nueva etapa de la cuarentena, afirmó el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, en declaraciones al canal TN.

Más temprano, el ministro de Salud de la Ciudad, Fernán Quirós, al brindar un informe de la situación de la pandemia, destacó que «casi el 75% de los casos de ayer fueron en CABA».

«La semana que viene tomaremos la decisión si seguir con la apertura o volver a medidas más estrictas», afirmó el funcionario porteño.

Según el último reporte oficial, de los 7.134 casos de COVID-19 en la Argentina, 2.618 son de la Capital, que esta semana superó a Buenos Aires en cantidad de contagios (2.411 tiene la Provincia).

Ante este panorama y con focos críticos en los barrios más vulnerables, la Ciudad analiza un regreso a la fase 2, con menor cantidad de actividades económicas y circulación en las calles.

En medio se cruzan también los reclamos de algunos intendentes del conurbano, que cuestionan la apertura porteña, y de sectores sindicales como la CTA, que ya solicitó oficialmente una marcha atrás en la etapa de cuarentena.

«En la medida en que veamos que el número sistemático cotidiano empieza a tomar una curva exponencial, que es la parte más difícil, en ese momento vamos a hablar de frente a la sociedad y vamos a pedir un nuevo esfuerzo para poder pasar esa última parte que nos queda, que es el período más difícil y poder haber pasado este primer gran momento de esta pandemia en la Ciudad», sostuvo Quirós.

La Ciudad habilitó esta semana las salidas de menores de 16 años durante los fines de semana por el lapso de una hora, algo que por el momento se mantendrá, aunque no se descarta retrotraer la medida más adelante.

«Vamos tomando para cada semana las decisiones de acuerdo a los datos que tenemos. Creemos que una caminata entre padres responsables y los niños, de una hora por fin de semana, sin interacción en el espacio público, no le va agregar riesgo a lo que está pasando en la Ciudad», consideró el ministro de Salud porteño.

Además, estimó que el pico de la enfermedad «ocurrirá a fines de mayo o principios de junio».

«Es importante decirle a la gente que en el momento que los casos aumenten debemos discutir medidas de distanciamiento físico más restrictivas», agregó Quirós.