El candidato a gobernador por el Frente para la Victoria en Río Negro, Martín Soria, definió el día de los comicios provinciales como el «segundo día más triste» de su vida.

«Este es el segundo día más triste de mi vida, pero también es la vida la que me enseñó que fuerte es el que nunca deja de levantarse», afirmó el intendente de General Roca, en referencía a al jornada de la muerte de su padre, el exgobernador Carlos Soria.

Al reconocer en la noche del domingo la derrota frente a Arabela Carreras destacó la «diferencia» de votos a favor de sus «oponentes» y agradeció los votos que recibió su candidatura.

«Quiero en este momento agradecerle a cada uno de ustedes, a cada uno de los rionegrinos que confió en el Frente para la Victoria como una manera de ponerle un freno a (Mauricio) Macri y todos sus socios», dijo.

Además, subrayó: «Hemos enfrentado hoy al oficialismo, a dos oficialismos trabajando juntos: a Macri y a todos sus socios, y ahí está el gobierno provincial».

«En una devolución de favores, el presidente Macri vació a su propia candidata y terminó trabajando para su socio gobernador.

Hemos visto una pelea totalmente desigual, que enfrentamos con coraje y convicción en las urnas», denunció.

Por último, remarcó: «Acepto y respeto la voluntad del pueblo de Río Negro en las urnas en el día de la fecha, pero quiero que sepan cada uno de ustedes que lamento profundamente que no pudimos conseguir la transformación que Río Negro se merece. Vamos a seguir, porque a nosotros nos une la esperanza y a ellos la desesperación».