El Banco Central tiene reservas necesarias para llegar a las elecciones presidenciales de octubre con un tipo de cambio «más o menos equilibrado», señaló hoy el economista Roberto Cachanosky.

En declaraciones a CNN Radio, Cachanosky también cruzó al ex presidente del Banco Central Federico Sturzenegger, al considerar que «no es serio profesionalmente» hacer estimaciones de largo plazo sobre las variables económicas de la Argentina y desestimar que se pueda pensar en una inflación de 1 punto mensual para fin de año.

«El proceso de desinflación será sustancial, rápido y más fuerte de lo que nadie espera», si se mantiene la política monetaria actual, había afirmado Sturzenegger, tras mostrarse confiado en que se podría llegar al final del año «con una tasa de inflación mensual de alrededor del 1%».

En este escenario, Cachanosky se mostró más cauteloso al analizar el proceso inflacionario y señaló que «puede llegar a bajar la inflación a dos puntos mensuales, lo cual para otro país es una inflación anual».

El economista analizó que es «medio complicado» que la inflación pueda bajar bruscamente, porque pasadas las elecciones de octubre o un eventual balotaje de noviembre, el país tendrá que empezar a ajustar de nuevo tipo de cambio y tarifas de los servicios públicos.

«¿Por qué hacer proyecciones de tan largo plazo? Si no se sabe ni lo que va a pasar mañana. Y yo tampoco lo sé. A ver: los economistas somos como algún político: vendemos humo», consideró Cachanosky.

Según dijo el economista, cuando un cliente le pide a un economista que le estime cuánto va a crecer el Producto Bruto Interno (PBI), el economista evalúa un «montón de suposiciones» acerca de lo que podría pasar.

Además, afirmó que hacer proyecciones como las que hizo Sturzenegger es una «ficción» y aclaró que los economistas pueden decir «cuál puede ser la tendencia», pero no dar proyecciones precisas.

«Se pueden hacer estimaciones de muy corto plazo. Hacer estimaciones de largo plazo, para mí, profesionalmente no es serio. Eso se inventó para las empresas. Nosotros lo vendemos. Son estimaciones», dijo el economista. 

Tipo de cambio


Cachanosky consideró que la «tranquilidad financiera» actual puede prolongarse al menos hasta las elecciones por las ventas de divisas que se registran en el mercado.

En ese sentido, evaluó que ahora hay venta de granos y, en consecuencia, se comercializarán dólares porque los productores necesitan pesos para pagar gastos operativos, mientras que el Tesoro vende 60 millones de dólares por día.

«Y el Banco Central algo de potencia tiene (para vender dólares), mientras no emite moneda. Lo único que podría haber es un cambio de plazos fijos en pesos al dólar», señaló el economista.

Si los depósitos en pesos hoy se dividen por 51, que es el tipo de cambio tope preestablecido por la política monetaria, está dando un resultado de entre 22.000 y 23.000 millones de dólares.

«Y hay potencia para cubrir eso. Tenés 10.000 millones de dólares que va a vender el campo, 9.600 millones que venderá el Tesoro y unos 7.000 millones que venderá el Banco Central. Ahí hay 25.600 millones de dólares. Se puede llegar a las elecciones con turbulencias, pero con un tipo de cambio más o menos equilibrado», remarcó Cachanosky.