La conductora Mirtha Legrand se mostró sorprendida por la estatua que habían hecho en su honor en su ciudad natal, Villa Cañás, de la provincia de Santa Fe y aseguró que no le «gustó», ya que se ve «rarísima».

La diva opinó en Polémica en el Bar, el programa que conduce su hija, Marcela Tinayre, por las noches de América, y dejó en claro que no estaba conforme.

«¿Qué es ese mounstruo que han hecho? Contame, estamos impresionados, yo por lo menos como hija. ¿Qué es esa estatua?, le preguntó Tinayre a su madre.

«No sé quién la hizo, no me gustó, yo no quiero hablar nada en contra de mi ciudad Villa Cañás y de los cañaseños porque sé que es un esfuerzo el que hicieron, pero evidentemente no es el óvalo de mi cara, no soy yo, me veo rarísima. Me mostraron antes de ayer la foto y dije:

´Muchas gracias´», opinó Mirtha, siendo políticamente correcta.
Pero su hija insistió: » «¿Cómo te va a gustar eso? Demasiado diplomática estuviste. Los dientes… ¡Es horrible mamá! Me niego a que esa seas vos», le dijo Tinayre.

Y la diva, entre risas, contestó: «Y bueno, ¿Qué querés que haga, Marcela? Son muy cariñosos con nosotros los cañaseños, pero esto no sé de dónde salió, tampoco sabía que estaban haciendo una estatua».

«Tengo gente amiga en Villa Cañás y le voy a preguntar quién fue el escultor o escultora y le voy a decir que realmente esto no me favorece. Es una lástima, no sé qué foto habrán tomado mía», agregó la diva, que además recordó a sus hermanos fallecidos.

«Una pena que no pusieron a Goldy, ella estaba en contacto siempre con muchos miembros de Villa Cañas. La verdad que los tres hermanos éramos muy cañaseños, pero el más ligado fue nuestro amado José. Muy emotivo», agregó.

El artista que realizó la estatua es el cordobés Daniel Melero, que fue convocado para homenajear a la diva en el festejo por los 121 años de la localidad santafesina.

«Se hicieron dos esculturas: una que es hiperrealista, con su color de piel, textura y el pelo natural, que como es más delicada queda adentro del salón; y la otra que es de metal con una pátina color bronce que queda afuera», detalló el artista.

Melero tardó dos meses y medio para realizar estas obras, donde Mirtha aparece sentada en una silla: «Se eligió esa posición porque es la más la más tradicional, la que más se ve cuando ella está en su canal y en su trabajo».

La estatua de metal fue erigida en una glorieta instalada en el paseo que lleva el nombre de la diva de los almuerzos.